La inclusión, a veces, es algo complicado. El poder llegar a todos, el hacer accesible los espacios, las actividades… no siempre es fácil. Pero merece la pena luchar por ello. Para poder llegar a la inclusión real se tienen que dar muchos factores. Aspectos que no pueden quedarse solo en palabras, sino en acciones. Por ejemplo las administraciones tienen que apostar por proyectos inclusivos, los participantes realmente tienen que querer realizar la actividad y que ésta sea de su interés, que quién la realice estén formado adecuadamente y sensibilizado.
Creemos que el proyecto de Naturaleza Escondida tiene todos estos ingredientes para organizar realmente rutas de senderismo inclusivo. La apuesta de esta edición 2021, ha sido realizar la Vía Verde de Puerto de Béjar a Béjar. Algo más de 8 km por un terreno ideal para la veintena de personas ciegas que han podido participar.
Y es que la Diputación de Salamanca ha apostado porque dentro de su programa de promoción turística haya rutas para personas, en esta edición, ciegas. Esa apuesta hace que la naturaleza esté un poco menos escondida para ellos. Si a eso le sumamos que el senderismo es una actividad que a los participantes de la ONCE les gusta. Que a ellos, como a todos, nos hace falta el aire puro, los espacios abiertos, disfrutar del tiempo libre.
Y bueno, los guías de las rutas, están preparados no solo para guiar en montaña, sino que además están especializados en el guiaje para personas ciegas. Algo que hace que la actividad sea mucho más segura para todos. ¡Ah! Y el último ingrediente que hace que todo funcione mucho mejor: la ilusión por este proyecto, las ganas de ayudar a descubrir los mejores rincones de la provincia salmantina a todas las personas. Algo que se nota y se ve en la cara de los participantes. Solo por eso… ¡merece la pena el esfuerzo! Seguiremos en este camino.